Actualmente, somos más conscientes que los recursos de nuestro planeta cada vez están siendo más limitados, y como va aumentando de manera progresiva el cambio climático. En Bug Stop trabajamos en soluciones que respondan a estas adversidades como el calentamiento global, la crisis energética o la pérdida de biodiversidad, con la finalidad de crear una huella ecológica y modelo de negocio sostenible.
Desde Bug Stop somos conscientes de nuestra responsabilidad en este nuevo proceso de cambios y por ello asumimos un firme compromiso en la reducción de emisiones en nuestras plantas de producción y la reducción del impacto medioambiental en las actividades llevadas a cabo por nosotros.
Asimismo, somos una empresa emprendedora donde fomentamos las nuevas ideas para ofrecer soluciones innovadoras y eficientes a nuestros clientes y usuarios con el menor impacto medioambiental posible.
Nuestros productos están compuestos mayormente de aluminio, que como todos sabemos es un metal 100% reciclable ya que puede reutilizarse de manera infinita sin que pierda ninguna de sus propiedades. Sus accesorios están compuestos de poliamida que es un derivado del Nylon, el cual se emplea en un gran número de sectores, lo que hace a la poliamida un material de elevadísima reciclabilidad.
Disponemos de un proceso garantizado de trazabilidad, donde aplicamos un seguimiento imprescindible para asegurar el control y verificación de las características del producto en todas sus etapas de fabricación, desde la llegada de la materia prima hasta su distribución en los distintos puntos de venta.
Este proceso es llevado a cabo de forma responsable con un consumo de recursos adecuado y de economía circular, tratando de reducir la producción de desechos y el uso de materias primas vírgenes.
Los productos de Bug Stop cumplen con todos los sellos de calidad exigidos a nivel europeo tipo AENOR, REACH, QUALICOAT, etc… que garantizan un producto de calidad y totalmente sostenible desde que se fabrica hasta su instalación.
Además, somos una empresa 100% española, apoyamos el consumo del producto de fabricación local, ya que tiene varias ventajas y no solo la de mejorar la economía del país. Una de las principales, es que al consumir un producto local reducimos las emisiones de gases contaminantes que provienen del transporte de lugares más lejanos, en este caso otros países, por lo que las emisiones de CO2 son muy elevadas. De esta manera ayudamos a minimizar el impacto medioambiental y la huella ecológica.
El fomento en la sociedad por un consumo sostenible, consciente y responsable, es una manera, tan válida como cualquier otra, de conciliar producción y rentabilidad con el respeto por las personas y por el medio en el que convivimos. Un buen comienzo para llevar a cabo este desarrollo sostenible es tomar conciencia de que cada uno de nosotros somos corresponsables de los efectos sociales y ecológicos de lo que compramos o consumimos, por lo que debemos actuar en consecuencia.
Depende de todos aportar nuestro granito de arena y colaborar en cambiar el modelo de consumo actual para ayudar a la sostenibilidad del planeta, nosotros creemos en un mundo mejor ¿y tú?
Introduce tus datos de acceso
Crea tu cuenta de cliente y regístrate como usuario de Bug Stop